See our Photo of the Week (and archive of more) books we recommend

Opinion Advertize Permission
To be notified of new articles Survey Store About Us

Entrevista con Nilda Elisa Tapia
y Olga Tapia
De La Mesa Campesina del Norte Neuquino

Usurpado: Este Campo Tiene Mucho Petróleo
Chos Malal, Provincia de Neuquén, Argentina

Nilda Elisa Tapia (izquierda) y Olga Tapia en Chos Malal, provincia de Neuquén, Argentina. Todos fotos por Nic Paget-Clarke.
Nilda Elisa Tapia (izquierda) y Olga Tapia en Chos Malal, provincia de Neuquén, Argentina. Todos fotos por Nic Paget-Clarke.

Una vista del juzgado municipal en Chos Malal, provincia de Neuquén, Argentina. Foto por Nic Paget-Clarke.
Una vista del juzgado municipal en Chos Malal, provincia de Neuquén, Argentina.

Nilda Elisa Tapia. Foto por Nic Paget-Clarke.
Nilda Elisa Tapia.
Olga Tapia. Foto por Nic Paget-Clarke.
Olga Tapia.

Comprando comida en una calle en Chos Malal. Foto por Nic Paget-Clarke.
Comprando comida en una calle en Chos Malal.

Arte en las calles de Chos Milal: Che Guevara esta mirando; el pañuelo, el ícono de Las Madres de Plaza de Mayo; y "Nunca Mas" a la dictadura. Foto por Nic Paget-Clarke.
Arte en las calles de Chos Milal: Che Guevara esta mirando; el pañuelo, el ícono de Las Madres de Plaza de Mayo; y "Nunca Mas" a la dictadura (1974-1983).

Nilda Elisa Tapia y Olga Tapia son miembros de la Mesa Campesina del Norte Neuquino. Realizó (y más tarde tradujo y editó) la entrevista Nic Paget-Clarke por In Motion Magazine el día 16 de octubre, 2014 en Chos Malal, en el norte de la Provincia de Neuquén, Argentina. Las hermanas Tapia estuvieron en Chos Malal para asistir en la Corte Judicial sobre la lucha de las familias Tapia, Moya y Escalona contra al empresario Jorge Oberholzer sobre a quien(es) es la tierra en donde la familia Tapia (en particular) ha vivido hace 80 años. (To read this interview in English: click here.)

Ayudamos a la gente que tiene problemas con los campos, con el agua

In Motion Magazine: Por favor, puedes hablar un poco de La Mesa Campesina del Norte Neuquino?

Nilda Elisa Tapia: Sí, La Mesa Campesina es un grupo de gente ¿sí? Nos juntamos todos y hacemos, buscamos, ayudamos a la gente que tiene problemas con los campos, con el agua, bueno todo así, así que se refiera a la naturaleza ¿sí?

Tienes abogados, tienes ingenieros agrónomos. La mayoría son ingenieros agrónomos los que están con La Mesa. Hay chicos que saben muchísimo, muchísimo y nos ayudan a la gente que sabemos menos, que tenemos menos conocimiento de --¿cómo te explico? -- conocimiento en cuanto a leyes, conocimiento en cuanto a enfrentar ciertos problemas con gente poderosa que quieren pasar por encima. Ellos tienen mucho conocimiento de eso y nos ayudan mucho. Es un grupo muy, muy bien organizado ¿no? O sea es una organización y está en muchas (lugares): Neuquén, San Luis, Mendoza, Córdoba, San Juan, Santiago del Estero.

A esos, les tenemos mucho respeto y bueno y así está por varias partes ¿sí? Y bueno, te digo nosotros estamos orgullosos de pertenecer a La Mesa Campesina. Sabemos que hay mucha gente que claro, los políticos sobre todo, no nos quieren. Pero ¿porqué no nos quieren a La Mesa Campesina? Porque La Mesa Campesina los sacude un poco. Los hace un poco poner el pie en la tierra porque a ellos no les importa contaminar, contaminar el ambiente, contaminar el agua, contaminar la tierra, contaminar lo que es la fruta. Y La Mesa Campesina, lo que hace es defender todas esas cosas.

Petróleo y gas

In Motion Magazine: Y un poco de ustedes. ¿Ustedes son campesinas también?

Nilda Elisa Tapia: Nosotras somos campesinas de nacimiento.

In Motion Magazine: ¿Sí?

Nilda Elisa Tapia: De nacimiento.

In Motion Magazine: ¿Dónde?

Nilda Elisa Tapia: Nacimos en la Túngar. Es un paraje que está de acá de Chos Malal, donde estamos haciendo la nota, son 90 kilómetros. Y todo campo ese campo tiene mucho, mucho petróleo.

In Motion Magazine: ¿Ahora?

Nilda Elisa Tapia: Ahora y siempre tuvo. Tiene petróleo y tiene gas. Entonces ¿qué pasa con eso? Vienen todos, viene mucha gente interesada en quedarse con esa tierra. Pero, nosotros llevamos como 143 años más o menos a que viven las familias campesinos. En esos lugares están la familia Tapia, Escalona, Moya y así unos cuantos más y, bueno, ha aparecido gente.

¿Cómo te explico?

Hay muchos que no saben leer. Hay otros que quizás sepan un poquitito, pero te darás cuenta que a mí me cuesta que yo tengo sexto grado yo vivo, yo estoy viviendo en Neuquén. Ella (redactor: su hermana Olga) vive en el pueblo en Buta Ranquil con mi hermano y yo vivo en Neuquén. Entonces, el hecho de vivir en una ciudad es como que la mente trabaja más. Aprendes muchas cosas ya sea porque lo ves por televisión, porque lo leíste en una revista. Pero los campesinos, no, porque ellos están con su mente en los animales, en el agua, si viene agua para regar sus plantas, en la gallina, si le pusieron los huevos o no le pusieron los huevos, en los chivitos que no se los vengan a comer los bichos de afuera. Entonces no hacen laburar mucho la cabeza y ellos están ahí con su mente como dormida.

Entonces va un vivo ¿sí? Y le charla y le charla y le charla y ellos entran y les dicen todas cosas lindas. Claro, que va a tener que esto, lo otro, como que le van a dar y después le pasan, le pasan el papel y que firme y eso es lo que pasa. Y así los engañan.

In Motion Magazine: OK. Y cuáles animales o cosechas trabajan en su familia?

Nilda Elisa Tapia: Nosotros tenemos chivas. Tenemos caballos, gallinas, gansos -- todo eso tenemos. Vacas, no, porque las vacas, viste, necesitan un campo más verde y este es muy… -- son campos agrestes ¿si? como secos. Es muy seco por ahí, a pesar de que tenemos el Volcán Tromen que está ahí. Pero es seco, son campos secos.

In Motion Magazine: Y ¿crecen plantas?

Nilda Elisa Tapia: Crecen plantas, pero todo eso el monte silvestre. No es que vos vayas a plantar eso y te va a dar enseguida porque, no, no, no, no son campos muy, ya te digo, agrestes.

Se pagaba con los cueros de chiva

In Motion Magazine: ¿Puedes habla un poco de tu conexión a la tierra?

Nilda Elisa Tapia: Es lo más lindo, es hermoso porque nosotros nos criamos ahí. Cuando yo, por ejemplo, era chica, mi mamá y ellos, también, por supuesto, mis viejos, sembraban papa, maíz, trigo, cebada, y después venía zapallo, cebolla, perejil, cilantro, morrones, arvejas. Arvejas, pero sabes era cantidades de ensalada que nos comíamos con de arvejas y huevos. Todo cosechado y de ahí, del campo. Iba mi papá, yo me acuerdo, iba una vez al mes al pueblo a caballo y se traía…

In Motion Magazine: ¿A caballo?

Nilda Elisa Tapia: A caballo, porque estábamos a 22 kilómetros desde el lugar que yo te estoy hablando que yo nací al pueblo hay 22 kilómetros. Y mi papá eso lo hacía a caballo y se traía una bolsa de harina, 10 kilos de azúcar, 10 kilos de arroz, 10 kilos de yerbas. Y eso, mi papá lo intercambiaba con el dueño del negocio, del boliche que le decían antes. Le decían boliche, no le decían negocio como ahora o despensa, le decían boliche.

In Motion Magazine: Boliche?

Nilda Elisa Tapia: ¿Por qué boliche? Porque ahí tenía desde todo -- desde la media, zapatos, todo. Todo, y se pagaba con los cueros de chiva. Todo.

In Motion Magazine: ¿Un gran mercado?

Nilda Elisa Tapia: Era, claro, como un gran mercado y ese gran mercado era de la familia Helen. Helen son turcos y bueno, ellos nos compraban los cueros de chiva, de liebre, de zorro, de conejo, todo eso. Lo intercambiábamos por mercadería y mi padre se venía con -- no había un auto, un camión que lo trajera -- se venía con un burro. Lo cargaban con dos maletas grandes y, bueno, ponía todo, lo ataba bien, y se traía a la casa con eso. Lo único que comprábamos ahí era eso, harina, yerba, azúcar, fideos, arroz y nada más porque lo demás lo teníamos todo ahí, todo lo teníamos en el campo.

Y lo que pasa es que ahora la gente de campo quien es nada más que los viejos, y los jóvenes por trabajo, por estudio, se van al pueblo ¿viste? Y ya una vez que llegaron al pueblo medio como que les gustó la cosa y se quedan pero el día que ellos se dan cuenta de qué es lo que es el campo, va a ser tarde. Va a ser tarde porque vos viste que en el pueblo… Yo que vivo en Neuquén, te cuesta mucho. Si no tienes un buen trabajo no puedes mantenerte, no te puedes mantener. Todo es muy caro, todo, y vos vas hac media cuadra y tienes que ir con la plata en la mano, media cuadra que hagas y tienes que llevar plata si no sirves para nada.

Olga Tapia: Donde vivo en Buta Ranquil tengo una huerta, le llaman huerta, y planto cebolla, perejil, ajo, para el consumo mío. No tener que te falta una hoja de perejil y tienes que salir a comprarla no. Yo tengo un pedazo de tierra ahí y ahí hago.

Nilda Elisa Tapia: Mira vos fíjate lo que yo pague por esto. (Redactor: Más temprano en el día, Nilda y Olga compró unas cositas en la calle – vea la foto.) Yo pagué 30 pesos. 30 pesos pagué por un kilo de mote. Mote se llama este, que es el trigo, que vos lo cosechas, lo desgranas, lo pones a hervir con cenizas, con la ceniza de vidriera que se llama, lo pones a hervir y haces el mote. Bueno, todo esto lo hacía mamá y nosotros, desde que la vieja no está, no volvimos a comer mote, tenemos que comprarlo ¿viste?

Ese campo fue usurpado

In Motion Magazine: ¿Cuáles son los problemas ahora con la tierra?

Nilda Elisa Tapia: Nosotros por ejemplo, en el lugar que nosotros nacimos y que de ahí fuimos a la escuela, tenemos toda una vida ahí, hay una historia de vida ahí en ese, en esa tierra. Ese campo fue usurpado. Nosotros le llamamos así, usurpado.

In Motion Magazine: ¿Tú tierra?

Nilda Elisa Tapia: Sí, sí, sí mi tierra porque antes en la época de la Conquista del Desierto (Redactor: La Conquista del Desierto era una campaña militar en los 1870 para dominar Patagonia por Argentina.) esos campos les pagaban a los generales, les pagaban con tierras. Bueno, pero habían tanto que yo creo que hay más de uno no debe saber que existe esa tierra. Cuando mi padre llegó, mi padre llegó a ese campo, ya esa tierra era de Anchorena (Redactor: los Anchorena era una de las familias antiguas terratenientes de Argentina.), ya tenía dueño, pero no había nada. Era campo, campo, campo, nada sin nada. Era yuyo, monte y nada más. Mi papa, cuando llegó ahí, limpió toda unas cuantas hectáreas. Limpió todo y empezó a sembrar. Empezó a sembrar plantas. Empezó a sembrar alfalfa.

Bueno, todo lo que te decía antes que cosechábamos nosotros ahí, y se hizo una casita de adobe y en la primera casita de adobe que hizo mi papa, ahí nací yo. Ella (Olga) nació en el pueblo, en Buta Ranquil. Ella es más rica (risas).

Gente que vivió toda la vida en su campo

In Motion Magazine: ¿Tienes conexión a las indígenas en esta área?

Nilda Elisa Tapia: Sí, sí, sí nosotras estamos en contacto con ellos porque también les ha pasado lo mismo que nos ha pasado a nosotros que han usurpado sus campos, porque hay petróleo y los han sacado. Lo más triste de todo esto es que gente que vivió toda la vida en su campo, gente que vivió toda la vida ¿sí?

Y el gobierno, el gobierno provincial ¿si? no hace nada por parar todo esto, porque está bien, hay trabajo, hay mucha gente que trabaja en el petróleo pero a ver, dale participación a la gente, inclusive a los mapuche, a los indígena, a los mapuche más que nada. Bueno, “Mira, yo te voy a hacer un pozo acá, pero vos vas a recibir tanto.” ¿Si? Hacelos, dales participación. No, ellos van. Los sacan del campo con sus animales y arréglatelas a donde vos puedas, pero no les dan nada. Donde puedan ir a conseguir un pedacito de tierra para vivir ahí los, ahí te tienes que ir porque ellos te sacan o te empiezan a encerrar, a encerrar porque hace rato el perímetro con alambre con lo que sea y listo y te quedas encerrado adentro. ¿Y los animales qué comen?

No, es terrible. Es terrible, terrible, terrible lo que están haciendo y por sobre todo yo lo culpo pero a ojos cerrados al gobierno provincial, porque el gobierno provincial sale a recorrer todo esto. Sabe, sabe lo que es un campesino. Sabe lo que es ir con un arreo, con una trashumancia, como vos dices. Sabe lo que es pero no hace nada. No hace nada él se lava las manitos.

Pero como hay plata

In Motion Magazine: ¿Hay otra cosa que puedes decir?

Nilda Elisa Tapia: Bueno sí. Lo que quería terminar de contarte es que este tipo que nos usurpó el campo a nosotros, él nos hace una denuncia por usurpación de campo. Dice que nosotros le usurpamos su campo, o sea que, que nosotros somos los usurpadores y él… o sea nosotros estamos en el banquillo del acusado y el tipo está mirándonos de afuera como si nada ¿a vos te parece eso? Donde yo nací ahí, fui a la escuela ahí, él no. El no vivió nunca ahí en ese lugar, nunca. Y él, nosotros sabemos que le ha pagado a la gente por ahí a gente analfabeta que no sabe lo que está haciendo. Entonces este, les ha pagado para que sea su testigo, para que atestigüen que él vivió ahí y no vivió ahí. No vivió jamás, nadie lo conoce, pero como hay plata de por medio… está todo bien ¿viste? Esta todo bien ¿qué va?

In Motion Magazine: Gracias.


Publicado en In Motion Magazine en el 27 de marzo, 2016.

También: